¿RONALDO-DEPENDENCIA? NO.

Cuenta la leyenda que Rodrigo Díaz de Vivar, más conocido como el Cid, ganó, ya sin vida, una batalla sólo con su inerte presencia. Esta mención viene a raíz de la lesión de la nueva estrella madridista: CR9, capaz de hacer temblar a sus rivales únicamente con su existencia. Cristiano Ronaldo se ha erigido, pese a su reciente llegada, como el auténtico líder del Santiago Bernabeu. Es el fichaje más caro de la historia blanca, su niña bonita y, a base de carisma, se ha metido en el bolsillo a toda una afición.

Una ausencia como la del astro portugués se nota y se sufre, digan lo que digan, pero este Real Madrid tiene muchos más argumentos a parte del '9'. El acoso de la prensa con este tema está siendo insoportable. La estrategia consiste en hacer ver que Ronaldo es la única pieza que mueve este proyecto, pero nada más lejos. Jugadores como Kaká o Benzema han sido los líderes indiscutibles en sus antiguos clubes y ahora parecen ser ninguneados. Capaces de ganar partidos por sí mismos, de sorprender, de conquistar balones de oro... Es estúpido decir que, sin Cristiano, este Madrid no sabe a lo que juega.

La ausencia del portugués resta muchos puntos y, si encima se afila la derrota en el Sánchez Pizjuán, la Ronaldo-dependencia puede llegar a parecer real. El Sevilla jugó para ganar, creó ocasiones y marcó. No se puede decir que fue el Real Madrid el que, sin su estrella, no supo hacer las cosas. Se encontró ante un rival muy duro, y punto.

Que si con Ronaldo hubiesen ganado, empatado... da igual. El equipo blanco tiene un firmamento con estrellas suficientes como para no necesitar al extremo, aunque a un jugador de tal magnitud siempre se le echa en falta.

Los mismos que a principio de temporada hablaban del bajo rendimiento de un jugador, que gustos a parte, es uno de los mejores del planeta (último Balón de Oro), ahora esperan un nuevo pinchazo de los blancos para seguir sacando punta a su Ronaldo-dependencia. Y ahí es donde deben estar Benzema, Raúl, Kaká o Van Nistelrooy para recordar que ellos también saben ganar ligas, copas, botas de oro y dorados balones... o si no la prensa tendrá razón. ¿Tanto se echa en falta al portugués?