AUTÉNTICOS TIPOS DUROS: CANTONA - ERIC EL ROJO (parte II)

Pocas semanas después de su llegada a Inglaterra, Eric Cantona ganaba con su equipo la liga inglesa. Al año siguiente abandonaría la disciplina del Leeds para fichar por el Manchester United, en noviembre de 1992. Fue el desenlace de su última bronca con el entrenador, Howard Wilkinson. Tras relegarle al banquillo, el técnico dijo sobre Cantona que pese a ser muy bueno, su carácter y su personalidad no encajaban en el fútbol británico y que estaba harto de caprichos de crío. También sentenció que nunca llegaría al nivel de los grandes jugadores del United.

El gran Eric encontraría un nuevo devoto en Manchester, sir Alex Ferguson, muy complacido de poder contar con el jugador francés. Allí conquistarían un segundo título de la Premier. Cantona ganaría en total cinco ligas inglesas y dos Copas. Con los red devils jugó un total de 143 partidos anotando 64 goles. Recuperó su puesto en la selección y, tras pasar por las manos de Houllier y Platini sucesivamente, Jacquet prefirió evitar los locos destellos de genio.

Una fecha a recordar en la carrera de Eric Cantona es el 25 de enero de 1995. Aquel día Eric el Rojo era expulsado por quinta vez en dos años. Mientras abandonaba el campo, recibió los insultos de un aficionado del Crystal Palace. El incontrolable francés quiso despedirse del hincha antes de irse y le propinó una patada voladora desde el terreno de juego. Esa es probablemente la imagen más famosa que nos ha dejado (mostrada en la parte I). La instantánea dio la vuelta al mundo. En principio se le impuso una condena al jugador de dos semanas de prisión, pero tras varios recursos se transformó en ciento veinte días de trabajos sociales. La suspensión deportiva duraría unos nueve meses. Recibió apoyo de otro de los auténticos tipos duros, Vinnie Jones, que le defendió de esta manera: "Eric ha hecho lo que a muchos nos gustaría hacer". La prensa no se atrevió a crucificar al francés. Aceptaron que la agresión era condenable, pero incluso le rindieron homenaje en algunos artículos quitándole parte de la culpa. Los medios trataron el tema como que su actuación era grave, pero que el problema era el vocabulario y las formas de los aficionados.

En 1996 llegó la Eurocopa y aunque Eric estaba jugando a un buen nivel, no fue convocado. Con la siguiente frase se despidió del fútbol profesional: "Un club de fútbol es como una novia; cuando ya no tienes nada que decirle, cuando ya no tienes ganas de compartir cosas con ella, más vale dejarla". No había una forma mejor de expresar su decisión.

Se convirtió en seleccionador de fútbol playa y se proclamó campeón del mundo. Su estrategia: "intento encontrar jugadores que corran diez metros con inteligencia, en lugar de correr cincuenta como tontos". En sus encuentros de fútbol playa también hubo hueco para sus trifulcas. Aún protagonizaría unas cuantas.

Su última declaración sorprendente tuvo lugar con el nombramiento de Domenech como entrenador del combinado nacional francés; "Domenech o cualquier otro, da lo mismo. Todos en el mismo saco. Se inclinan todos hacia delante para que les den por detrás".

Pese a sus sanciones, sus rabietas, su espíritu peleón... Cantona fue un jugador maravilloso, un genio. Es y siempre será, el Rey de los Bad Boys.

A continuación dejo un vídeo sobre el susodicho... La calidad no es muy buena, pero se puede apreciar lo que Canto era capaz de hacer.