TENERIFE (1) - R. MADRID (5)
Higuaín (28' y 40'), Ayoze (47'), Kaká (48'), Ronaldo (79'), Raúl (91')
Este Madrid es una apisonadora. Así de claro. La Champions es otra historia, vale, pero en la competición doméstica el conjunto blanco está arrasando. Va de goleada en goleada y en los últimos cinco partidos ha conseguido 20 goles. Y es normal, porque con delanteros como Ronaldo, Kaká o Higuaín lo raro sería no tener esa contundencia en ataque.
Higuaín (28' y 40'), Ayoze (47'), Kaká (48'), Ronaldo (79'), Raúl (91')
Este Madrid es una apisonadora. Así de claro. La Champions es otra historia, vale, pero en la competición doméstica el conjunto blanco está arrasando. Va de goleada en goleada y en los últimos cinco partidos ha conseguido 20 goles. Y es normal, porque con delanteros como Ronaldo, Kaká o Higuaín lo raro sería no tener esa contundencia en ataque.
Especialmente me llama la atención lo de Higuaín. En pretemporada todo apuntaba a que sería suplente prácticamente toda la temporada, pero lo que son las cosas, ahora es titular, es el máximo goleador del equipo y está metido de lleno en la lucha por el pichichi. También llamativos son los números de Ronaldo. Va casi a un gol por partido y quién sabe cuales serían sus registros de no haberse lesionado y perdido tantos encuentros.
O incluso el cuestionado Kaká, que pese no estar al mejor nivel lleva una buena cifra de goles.
Pues con semejante trío atacante y ante una defensa tan blanda como la del Tenerife, pasó lo que tenía que pasar. Pero aunque no lo parezca, costó más de lo que refleja el marcador. El Tenerife no puso las cosas fáciles, sobre todo en los primeros minutos, con una buena presión y sin dejar apenas espacios atrás. Pero claro, a los de Oltra les falta lo que le sobra al Madrid: gol. Y este tiene nombres y apellidos: Gonzalo Higuaín. El argentino volvió a hacer un partidazo y volvió a marcar por partida doble como ya hiciese la semana pasada ante el Villarreal. Sus dos goles antes del descanso parecían sentenciar el choque, pero nada más comenzar la segunda mitad, Ayoze, en una jugada bastante polémica, recortaba distancias y mantenía vivas las esperanzas de los locales. Pero no por mucho tiempo. Y es que a perro flaco todo son pulgas. Apenas unos segundos después Higuaín asistía a Kaká para que el brasileño devolviese la ventaja de dos tantos.
A partir de ahí el partido se volvió loco, se convirtió en un toma y daca y las ocasiones se sucedieron en las dos áreas. Pero claro, en el intercambio directo de golpes el Tenerife salió perdiendo. Al dejar huecos atrás, Ronaldo, Kaká y compañía se sintieron más cómodos y pudieron campar a sus anchas. Incluso se vio una versión de Kaká más cercana al crack que se supone que es. Como resultado, Ronaldo amplió la diferencia al transformar una pena máxima. Y no, está vez Xabi Alonso no pidió tirarlo. El partido estaba resuelto y ya era una fiesta para los madridistas. Sin embargo, alguien más quiso sumarse a la celebración, un invitado que ya estaba casi olvidado por todos: Raúl. El siete volvió a marcar cuatro meses después, por fin, para cerrar una nueva goleada de los suyos, que pese a todo, siguen a dos puntos del Barcelona.
O incluso el cuestionado Kaká, que pese no estar al mejor nivel lleva una buena cifra de goles.
Pues con semejante trío atacante y ante una defensa tan blanda como la del Tenerife, pasó lo que tenía que pasar. Pero aunque no lo parezca, costó más de lo que refleja el marcador. El Tenerife no puso las cosas fáciles, sobre todo en los primeros minutos, con una buena presión y sin dejar apenas espacios atrás. Pero claro, a los de Oltra les falta lo que le sobra al Madrid: gol. Y este tiene nombres y apellidos: Gonzalo Higuaín. El argentino volvió a hacer un partidazo y volvió a marcar por partida doble como ya hiciese la semana pasada ante el Villarreal. Sus dos goles antes del descanso parecían sentenciar el choque, pero nada más comenzar la segunda mitad, Ayoze, en una jugada bastante polémica, recortaba distancias y mantenía vivas las esperanzas de los locales. Pero no por mucho tiempo. Y es que a perro flaco todo son pulgas. Apenas unos segundos después Higuaín asistía a Kaká para que el brasileño devolviese la ventaja de dos tantos.
A partir de ahí el partido se volvió loco, se convirtió en un toma y daca y las ocasiones se sucedieron en las dos áreas. Pero claro, en el intercambio directo de golpes el Tenerife salió perdiendo. Al dejar huecos atrás, Ronaldo, Kaká y compañía se sintieron más cómodos y pudieron campar a sus anchas. Incluso se vio una versión de Kaká más cercana al crack que se supone que es. Como resultado, Ronaldo amplió la diferencia al transformar una pena máxima. Y no, está vez Xabi Alonso no pidió tirarlo. El partido estaba resuelto y ya era una fiesta para los madridistas. Sin embargo, alguien más quiso sumarse a la celebración, un invitado que ya estaba casi olvidado por todos: Raúl. El siete volvió a marcar cuatro meses después, por fin, para cerrar una nueva goleada de los suyos, que pese a todo, siguen a dos puntos del Barcelona.
Por Juan José Fernández Pérez
El Real Madrid está metiendo mucha presión al FC Barcelona. Su juego está siendo muy contundente y, pese a los buenos resultados de los azulgrana, están a tan sólo 2 puntos.
ResponderEliminarEl FC Barcelona debe recuperar su juego (desde mi punto de vista hicieron un partidazo ante el Málaga) si no quiere verse superado en la clasificación.
Nos espera un final de liga muy interesante